La ceguera espiritual y genética del árbol del bien y del mal

Hoy mientras dormía, soñé con una lámpara que alumbraba los ojos de mi espíritu, y los ojos de mi entendimiento. Y entonces pensaba que cuando Adán y Eva “comieron del fruto” del árbol del bien y del mal, “sus ojos se abrieron” y me pregunto si la lámpara del Señor dentro de ellos, se apagó. También me gustaría dedicar algún tiempo a estudiar la lámpara de los ímpios. Hay una interesante relación aquí entre árbol, frutos y ojos. 

Pero antes de profundizar en este tópico debo confesar que he pasado varios meses pesando cada uno de estos pensamientos antes de considerarlos como revelaciones. Una de las cosas que hago es poner todo esto bajo la perspectiva de DESCANSO que ya tenemos en Cristo Jesús, pues lo último que quiero es que una revelación nos haga trabajar más o nos lleve a una posición de esfuerzo humano, tratando de vencer lo que Cristo ya venció.

De manera que con el pasar del tiempo, buscando sabiduría en la Palabra, he concluido que la gran victoria y conquista de Cristo nos debe llevar a una PROFUNDA renovación de nuestro entendimiento y transformación de nuestra mente. Que ciertamente no estamos luchando con la sangre o la carne, sino que luchamos con MENTALIDADES que no sólo pueden ser personales, sino fortalezas generaciones. Así que pudiera resumir diciendo que no es un asunto de vencer la carne y sus comportamientos, sino de vencer las mentalidades carnales, naturales…TODO ESTA EN LA MENTE. Y necesitamos de la semilla de la Palabra de Dios para transformarla.

El pecado entró por los ojos. Los ojos son la lámpara del corazón (Mateo 6:22) . Si la luz que entra por el ojo es clara, todo el ser disfrutará de luz. Pero si el ojo está enfermo todo lo que entra es oscuridad. Esto nos lleva a trabajar con el asunto del engaño, eso nos hace ciego. Esas son las fortalezas mentales, imaginaciones y altivez que estaremos destruyendo estos años, estamos removiendo velos que no dejan que la palabra produzca en nosotros el fruto. Velos que hacen estériles nuestros corazones. Todos tenemos niveles de engaño, todos tenemos velos. Parte del proceso de sanidad interior consiste en ser guiados por medio de la Palabra a toda verdad y muchas veces eso requerirá re-evaluar momentos de nuestra infancia, crianza, o momentos en nuestra vida en el que se produjo el dolor de una carencia y desarrollamos estructuras mentales o mentalidades basadas (a lo que muchas veces llamamos traumas) y que no nos permiten caminar en victoria.

Pero continuando con el tema, cuando pienso en “malvados” no sólo pienso en las personas que no conocen a Cristo o las que hacen cosas moralmente incorrectas, pero me he dedicado también a pensar cuando hacemos lo bueno y no sabemos porque lo hacemos, quizás esté siendo algo extremista, pero me lleva a pensar en la religiosidad como un conjunto de obras muertas. Esta palabra es clave para quitar máscaras de auto engaño y auto justificación que busca por medio de las acciones manipular a Dios y redimir con obras lo que Cristo redimió. Así que como una nota mental, sería bueno en esta década, quitarnos las máscaras, desarraigar las semillas de autoengaño que producen un fruto de obras muertas, que lo único que presentan es una falsa piedad y falsa devoción pues a la final la intención del corazón no es agradar a Dios o rendirlo, sino conseguir un propósito personal. Y fíjate algo en el siguiente verso:

Mateo 7:22-23 Reina-Valera 1960 (RVR1960) “Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad.”

Ese verso considera malvado al que hacía las cosas correctas pero en realidad no eran conocidas ni las obras, ni las personas por Dios

unsplash-image-G1iYCeCW2EI.jpg

Para que haya luz en todo mi cuerpo; mi ojo debe estar sano.

Ha decir verdad creo que en la medida en la que nos acercamos a los últimos tiempos la confusión de babilonia aumentará, de manera que veo un especial interés de parte de Dios es despojarnos de todo engaño, en sanar nuestro ojo. El año 2019 y la década de los 20 será un tiempo de frutos. Pero no creo que sea sólo de buenos frutos, sino que también se manifestará todo lo que hemos sembrado. O quizás habrá tanta confusión que también se trate de aprender a diferenciar el fruto verdadero del mal fruto.

El árbol del bien y del mal tenía un fruto del cual Adán y Eva comieron. Creo que debemos entender con mayor amplitud cuál era “el fruto” de ese árbol y reconocer si en nuestro andar todavía seguimos participando del árbol del bien y del mal, en lugar de tomar parte y comer del árbol de la vida que  es Cristo.

Algo interesante es que ellos quedaron “ciegos espiritualmente” y se “abrieron sus ojos naturales” cuando comieron. Es como si se hubiesen hecho “uno” con lo que comieron. La comida los encegueció. 

Otra cosa interesante es que el año pasado, justo para estas fechas estábamos hablando de lo mismo. Hablamos de la ceguera espiritual y también del engaño. Sin embargo este año, más que un asunto de la “temporada de invierno”, es un enfoque más profundo para todo el año 2019 y la década que estamos a punto de entrar.

Claro, recordemos que a finales del otoño empezamos a sembrar para la siguiente temporada y es un tiempo de re-dedicar el templo. Así que, si nos “hacemos uno” con el alimento del árbol del conocimiento del bien y el mal  “daremos a luz” corrupción.

Esto va más allá del principio de la Ley de la siembra y la cosecha en término de acciones que traen consecuencias. Aquí creo que Dios nos está hablando de una genética de serpiente que se produce. Por eso la paternidad es satánica, Jesús dijo “vosotros sois hijos de su padre satanás”. 

El alimento del árbol del bien y del mal, produjo una “simiente” y eso es un tipo de semilla. 

Es interesante meditar en la relación que hay entre la mente y el corazón. Cómo los ojos, siendo la ventana del corazón, afectan nuestros pensamiento y mentalidad natural. En lo personal creo que la relación ojos, corazón (mente) y boca se llama APETITOS.

Y he allí un asunto interesante de meditar, pues ciertamente tenemos seguridad y DESCANSO en Cristo, El venció al pecado, pero nosotros procuramos ser apartados, consagrados, separados, no para tratar de vencer el pecado sino para resistir los apetitos. Jesús no sólo venció el pecado sino el PODER del pecado, pero es trabajo personal resistir los apetitos.

Screen Shot 2020-07-01 at 12.24.30 PM.png

El establecimiento de la genética de Dios por medio de la semilla

La única manera de dejar de comer de ese fruto es, si los ojos de nuestro corazón son alumbrados. Sólo si Dios alumbra nuestras tinieblas.

Hay una lucha entre dos tipos de simientes. La simiente de rectitud por medio de Cristo , quien murió en un madero (representación del árbol del bien) y la simiente de satanás. Hay una lucha por la simiente y entre la simiente. Dos genéticas.

El apóstol Mario Rivera escribió esto que me gustó:
Dios inicio la creación con el sistema de las SEMILLAS porque denota el proceso para desarrollar el propósito de Dios. 

  • Dios coloco un PATRON original de todo en la tierra dentro de una SEMILLA. 

  • Dios coloco el futuro de la humanidad y de la tierra dentro de la semilla. 

Génesis 1:12 12 Y produjo la tierra vegetación: hierbas que dan semilla según su género, y árboles que dan fruto con su semilla en él, según su género. Y vio Dios que era bueno. 

La intención de Dios con el sistema de la SEMILLA es que cada uno de nosotros reproduzcamos lo que traemos por dentro.  Simplemente lo que debíamos hacer es reproducir lo de Dios, desde adentro hasta afuera. 

Cuando aquella primera siembra o semilla llamada Adán y Eva se echaron a perder, Dios con otra semilla que salio de El, declaro daría la redención. De manera que el futuro de la humanidad y de la tierra, como la redención de la humanidad está dentro de una semilla, eso es la esfera de la victoria está en la semilla

Génesis 3:15 15 Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y su simiente; él te herirá en la cabeza, y tú lo herirás en el calcañar. 

  • Este verso teológicamente, proféticamente se refiere a Cristo quien vendría a VENCER a Satanás. 

  • Sin embargo el termino SEMILLA (simiente) me permite ver como Dios diseña la victoria de sus hijos y es por medio de la SEMILLA.  (Su Palabra)

El anda detrás del hombre y la mujer que tienen lo que es de El, su IMAGEN, su SEMILLA, su SANGRE, su ESPERMA. 

Por eso creo que 2019 y la década de los 20’ será un tiempo donde se revelará lo falso de lo verdadero. Enfatizo en la palabra REVELAR, remover de velos.

Previous
Previous

Oración de Re-dedicación del Cuerpo

Next
Next

La Luz es la Gloria de Dios